La narrativa, en forma de  cuentos, leyendas, canciones, “corridos” (canciones que representan historias) e historias familiares que se heredaban de padres a hijos, han representado un elemento fundamental en la creación de la cultura.

A través del tiempo, la narrativa ha evolucionado, puesto que antes de esta era digital las historias formaban parte de las relaciones familiares desde los primeros años de vida, donde la convivencia y los lazos de padres a hijos se fortalecían. Por lo tanto, los niños antes de incorporarse al espacio escolar poseían una gran potencialidad psiquica y ricas reservas simbólicas las cuales les servían  para incorporarse a una sociedad donde prevalecían los intercambios lingüísticos, potenciando los procesos de simbolización en los primeros años de vida.

IMG_8883

La escolaridad se caracterizaba por la imposición de un lenguaje mas bien académico, pero que quedaba complementado por las características de las costumbres sociales que el niño obtenía de su medio.

En tiempos anteriores,  las primeras estructuras del sujeto se construían en la familia de acuerdo a la jerarquía en el desarrollo de la psique:  primer encuentro (madre-hijo),  donde la madre  se ocupaba de su papel como una importante profesión deseando al niño desde antes de su nacimiento, dedicando gran parte de su tiempo (si no es que todo)  a procurar  el cuidado, alimentación, los arrullos y cariños maternales y la construcción del lenguaje, importantes para el despliegue del psiquismo del sujeto, desarrollando el proceso de simbolización del niño y construyendo su carácter libidinal (en un segundo momento con la relación del padre en el seno del hogar) dando como resultado un niño- sujeto con la riqueza simbólica necesaria para enfrentar un tercer encuentro, encuentro con el espacio social, ampliando su oportunidad para crear nuevas representaciones incrementando sus procesos sustitutivos y accediendo a la complejización del psiquismo. Teniendo como característica principal la relación emocional primaria.

Nuestra sociedad se ve afectada hoy por la falta de esas estructuras primarias en la sociedad global causadas por la falta de tiempo en la convivencia entre padres e hijos y la falta de interacción dentro de las familias.  Es por ello que existe la gran necesidad de promover estos intercambios hacia la motivación de la producción lingüística, sustituyendo esos primeros espacios de encuentro del niño.

Las nuevas narrativas que se nos ofrecen esta era digital brindan una oportunidad única de re construir estos intercambios, estableciendo nuevas relaciones en los niños desde su propia subjetividad al poder interactuar de una forma viral con las tramas, los conflictos y personajes o personas reales o ficticias dentro de una realidad virtual, promoviendo la interacción al proporcionar  medios y espacios para acceder a un pensamiento dinámico, singular, creativo y transmisible, por medio del despliegue del discurso, mediante la narración y el diálogo, generando además espacios donde se fomenta el respeto hacia la posición subjetiva de cada individuo.

IMG_0956

En la actualidad, gracias a la tecnología se puede proveer, tanto en los niños como en cualquier persona, la oportunidad de desarrollar nuevas estructuras narrativas y el que logren los intercambios sociales y culturales con una infinita riqueza simbólica.

Hablando de las Narrativas Transmedia, la posibilidad de un sujeto de convertirse en actor y productor de  historias e intercambios lingüísticos se convierte en una realidad, llevándose a cabo la promoción de un posicionamiento activo y crítico que emociona y favorece la expresión y potenciación de la actividad reflexiva al tomar como punto de partida el relato y la participación colectiva multimedia contribuyendo  desarrollar  esas estructuras perdidas.

IMG_0952

En palabras de M. Casas un verdadero “entrenamiento de simbolización”, hace aparecer un sujeto deseante, donde “A través de la narración y la reproducción de la trama que como función anticipadora del sujeto hace aparecer al sujeto deseante (curiosidad, deseos de saber) que se logre por medio de la relación que se establecen con los personajes.” Siendo estos “modos muy vivos de jugarse las identificaciones que configuran a su vez, una red que se organiza desde el discurso familiar.. en ese tránsito también se aprende a sustituir”. 

Por lo tanto, al interactuar activamente en historias de realidad virtual, los niños van avanzando en su constitución como sujetos, haciendo una trasferencia de sus propias estructuras subjetivas.

IMG_0195

En cuanto a la lectura y discusión grupal esta ha dado la oportunidad de se produzcan cambios subjetivos en los niños y que estos puedan consolidarse a través de la contradicción discursiva entre los miembros de nuevos espacios significativos, promoviendo la confrontación, el dialogo y la crítica entre semejantes.

https://www.youtube.com/watch?v=GoIvkA0bEJ8

Gracias a historias transmedia como Inanimated Alice http://www.inanimatealice.com dónde los niños pueden no solo leer, sino percibir de modo multisensorial mundos narrativos virtuales se motiva la capacidad de transferir emociones y desplegar su posición subjetiva hacia el mundo que les rodea.

Las historias del modo en que antiguamente se dieron, hoy se sustituyen por una participación activa, dónde se posibilita la transmisión a partir de la producción  multimedia colectiva fortaleciendo así la psique del niño.

https://www.youtube.com/watch?v=_2pii1nb8BM

El poder ofrecer a los niños, en los espacios escolares, la oportunidad de interactuar con otros fuera del espacio físico, partiendo de  elementos personales enriquece la comprensión y la síntesis del mundo, pues lo importante es el intercambio grupal, (no la cantidad de información que se consume), mediante la relación de cada niño desde su subjetividad con la narrativa propuesta, promoviendo que entre ellos interactúen, motivándolos a “conectarse”, “preguntarse”, “visualizar”, “inferir” y “transformar” (habilidades fundamentales del lector según Pearson) la propia trama, centrándose como sujeto activo y desencadenando factores de transferencia que construyen la personalidad y fortalecen las relaciones intrapersonales y interpersonales del sujeto, como el autoconocimiento, la autoestima, la conciencia de sí mismo y de los demás y la empatía.

IMG_0333

Desde mi punto de vista, estas nuevas formas narrativas pueden considerarse un nuevo género literario pues llevan consigo una carga emocional distinta a la de una lectura común, puesto que intervienen elementos audiovisuales que activan estructuras cerebrales que se conectan entre sí para lograr niveles de pensamiento complejos y trasferencias de cadenas de emociones relacionadas con estos estímulos, estableciéndose compromisos singulares de sus características subjetivas.

Se movilizan capacidades como la interpretación, la visualización y la generación de preguntas combinando las propias experiencias y conocimientos previos con las experiencias propuestas para crear imágenes mentales que amplían la comprensión.

Se activan los sentidos para imaginar, crear, predecir, sintetizar y producir a través de múltiples descripciones y lenguaje vívido y multisensorial, para después lograr que  se utilicen recursos simbólicos individuales para formularse  hipótesis sobre lo que perciben, buscando diferentes desenlaces en las historias, y buscando  información  no descrita o popuesta, sino en escondida en su propia producción subjetiva, la cual complementa estas historias sustituyendo la narrativa tradicional en una amplia narrativa viral que provoca un intercambio cultural incorporando nuevas experiencias.

Por medio de la narrativa transmedia: discurso, diálogo virtual, lectura de una trama y creación literaria (multimedia) colectiva se pone en juego el despliegue de la producción representativa a través de nuevos lenguajes, la apertura a nuevos referentes y la apropiación de nuevos recursos simbólicos que generen seres humanos con habilidades complejas y una rico bagaje lingüístico que fortalezca su psique y que cree personas capaces de transformar y actuar asertivamente en este mundo global al que pertenecen.