En tiempos del confinamiento por la crisis sanitaria del coronavirus la televisión como otros sectores de la sociedad se ha visto golpeada drásticamente. Desde que se instauró el Estado de Alarma, aún presente,  las cadenas y productoras de televisión se vieron obligadas a paralizar la mayoría de las producciones, sobre todo, las grandes producciones de entretenimiento que manejan mucho personal en rodaje,  al igual que la mayoría de las series de ficción. En muy breve espacio de tiempo las cadenas de televisión han tenido que re-adaptarse y discriminar entre aquellas producciones que se podían intentar mantener y aquellas, las más, que ha habido que cancelar lo que está alterando sus parrillas de emisión presentes y alterará las futuras.

La necesidad de adaptarse y reinventarse ha sido la tónica del funcionamiento en la mayoría de ellas.

Añadido a esto por el lado del espectador confinado se ha producido el fenómeno  de que la televisión ha visto incrementado de forma exponencial su consumo (en el mes de marzo por encima del 30 % en todas las comunidades). Hay mucha más gente frente al televisor y a la par la publicidad está decreciendo notablemente. Los anunciantes  y el número de spots se han reducido. Se han reducido las inversiones publicitarias por la imposibilidad de vender determinados productos y también porque se han visto afectados por esta crisis los rodajes publicitarios.

Un momento de gracia para las cadenas que ven incrementado notablemente su número de espectadores pero que tienen que vigilar la rentabilidad de sus proyectos ante el descenso de la publicidad y por tanto su rentabilidad.

Con todo este panorama esta es mi radiografía de la televisión actual bajo el paraguas del hashtag  #YoMeQuedoEnCasa:

  • Desierto de las producciones habituales: como ya hemos dicho son múltiples los programas y formatos que han desaparecido de las parrillas presentes y en su planificación futura por la crisis del coronavirus. Sobre todo los grandes formatos que han manejan mucho equipo y público. Y otros que han tenido que ser discriminados por la fórmula de establecer unos servicios mínimos. Es decir tener a los mínimos equipos trabajando. Operación Triunfo, Got Talent, La Voz, Corazón, A partir de hoy, La habitación del pánico, concursos, casi todas las series de ficción han tenido que paralizar sus rodajes. Algunos de estos programas como Masterchef mantienen su emisión por las ediciones ya grabadas pero han tenido que paralizar las futuras. Cierto es, que algunos ya producidos están en la nevera esperando quizá un momento de mayor rentabilidad publicitaria, como es el caso de Idol Kids de Mediaset, cuando, en lo que a audiencia se refiere, este era el mejor momento para su emisión. Con las familias, más que nunca, unidas frente al televisor.
  • Vuelta al clásico informar/educar/entretener. En la televisión ha vuelto a tener más sentido que nunca su propósito originario de informar, educar y entretener. Los programas y contenidos informativos inundan las parrillas. Al igual que los programas especiales sobre el coronavirus. Es uno de los contenidos más presentes en todas las cadenas. En este sentido cabe destacar que se ha considerado dentro del Estado de Alarma a la televisión (como otros medios de comunicación) un servicio imprescindible que puede mantener su actividad siguiendo los parámetros de seguridad y prevención de salud pública.
  • El consumo televisivo aumenta exponencialmente. Desde el pasado 14 de marzo, el crecimiento ha sido exponencial. En el último mes el consumo no ha bajado dos días de los 300 minutos por persona. Los espectadores, han visto en marzo una media de casi seis horas y media. Y curiosamente en la franja de edad donde mayor ha sido el incremento del consumo es en la de los jóvenes de 16 a 24 años.  Y esta cifra sale solo con la utilización clásica del televisor. No con otros usos del televisor que también ha aumentado: internet streaming, play video y gaming.

Respecto de este punto os recomiendo echar un vistazo a este detallado informe de Barlovento Comunicación: Informe especial de marzo de 2020 del cambio de hábitos frente al televisor por la crisis del coronavirus.

  • Un aumento destacado de la audiencia social en televisión. el cómputo total del mes de marzo de 2020 es de 10 millones de tuits casi un millón y medio más que el año pasado. Un incremento que puede deberse al aumento del número de espectadores y a la necesidad de socializar y compartir.
  • La televisión tira de lo digital. Por primera vez vemos como la televisión tradicional hace un uso imprescindible de lo digital a la hora de tener que usar las videoconferencias y los streamings caseros para poder dotar de contenidos a sus programas informativos, de actualidad y de entretenimiento.
  • La reinvención de contenidos: Respecto del último punto de esa reinvención surgen nuevas formas de contar prescindiendo de platós y rodajes tradicionales. La fórmula “Desde casa…” de varios de los formatos tradicionales ahora basados puramente en el streaming casero y la videoconferencia: “El intermedio: desde el sofá”, “Late motiv. En casa”, “Lo de Evole”, “Zapeando en casa” (en este caso un formato fallido). Y fórmulas mixtas como”La resistencia. Lo que de verdad importa” grabado en un teatro como siempre pero con el mínimo de personal, cámaras fijas sin operadores. Alternado con visitas alejadas al plató y video llamadas. O “El hormiguero Quédate en casa” con plató y mínimo de colaboradores y conexiones con invitados en videoconferencia. Incluso ficciones como la serie  “Diarios de la cuarentena” en este caso con contenido propio de la propia cuarentena, y no exento de polémica, por cierto.

Os dejo un artículo publicado en  Vertele sobre las audiencias de los programas desde casa.

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  • La reconversión de formatos: Curiosamente casos como el formato “Sálvame” que de ser el formato de entretenimiento hardcore se ha reciclado en una suerte de mezcla de programa informativo y divulgativo sobre el coronavirus, sin abandonar la actualidad amarilla de sus personajes habituales. Y sus derivados: “Sálvame Deluxe”.
  • La supervivencia de formatos: la supervivencia por excelencia de un reality “Supervivientes” (los únicos españoles que actualmente pueden estar en la playa, juntos y con contacto) junto con todas su variantes de plató con mínimo personal y colaboradores y sin público. Y por supuesto con videoconferencias con los familiares que no se pueden trasladar a plató.
  • La audiencia genera contenidos: Esto quizás en menor medida y con más dificultad. Como el ejemplo de “12 meses, 12 causas: de balcón a balcón” de Telecinco o el programa en La1 vídeos “Todos en casa” un formato en el que los ciudadanos podían participar contando su día a día (aunque en este caso otra vez, una prueba de ensayo error, fue retirado en su tercera emisión).

  • Formatos que trasladan su versión a las redes sociales o en canales online: “Got talent en casa” Donde varios días a la semana se suben nuevas actuaciones a Facebook e Instagram de artistas que ya han pasado previamente por el programa. Y un día a la semana el presentador habitual, Santi Millán, a través de la cuenta de Instagram del programa comenta los vídeos con los artistas y jueces. Pero no solo estos vídeos, también con las actuaciones que los seguidores quieran compartir con el programa. Para generar y aprovechar la conversación con su público, el programa habilita el hashtag #GotTalentEnCasa en Instagram y TikTok, e invita a todos a participar colgando sus vídeos. O el programa “Qarenta», un nuevo concurso familiar que se emite en la plataforma Mtmad justo después de los aplausos, presentado por Cristian Gálvez. Contenido propio de la cuarentena con la fórmula del streaming casero, una vez más.
  • Contenidos específicos educativos y de salud: contenidos centrados en la televisión pública. En la 2 de TVE “Muévete en casa” para el entrenamiento deportivo o “Aprendemos en casa”, puesto en marcha por el Ministerio de Educación y Formación Profesional y tampoco exento de polémica.  O el programa «El método» un programa de divulgación científica en torno al coronavirus creado por nuestros compañeros de El Cañonazo Transmedia para RTVE.
  • Las repeticiones: tiramos de archivo. Sobre todo de los programas concurso en las cadenas en abierto. Muy interesante en este punto es la recuperación por la cuarentena en RTVE.es de míticos formatos como “Puesta a punto” con Eva Nasarre o “Con las manos en la masa” de Elena Santonja.
  • Contenidos de estreno exclusivo en las plataformas de pago de las propias cadenas: #Quédateencasa con Mitele y con Atresplayer.

Y no puedo más que hacer múltiples cuestiones sobre qué pasará con la televisión después del confinamiento. Múltiples cuestiones que hoy por hoy no soy capaz de responder. Aquí os dejo alguna de ellas:

  • Desierto de producciones ¿Qué pasará con todo lo que no se ha podido producir durante el confinamiento? ¿Cómo se cubrirán esos huecos de parrilla?
  • ¿Se crearán nuevos formatos más rápidos de producir?
  • ¿Habrá un abaratamiento de las producciones?
  • ¿Qué quedará del streaming casero? ¿se afianzará su uso como una nueva forma de narrar o desaparecerá?
  • ¿Descenderá el consumo de televisión o se producirá una mayor fidelización de la audiencia?
  • ¿Se mantendrá el consumo juvenil o la televisión volverá a ser para mayores?

 

Hoy por hoy, como en casi toda la sociedad. la televisión está dando un uso público más allá de la rentabilidad económica. Después de esta crisis como en todo habrá que replantearse los modelos de producción. ¿Qué pasará? ¿Dónde nos llevará todo esto? Está por ver. Espero poder contároslo en un este mismo blog en un artículo post confinamiento.  Y espero y deseo que no sea muy tarde…

*Actualizado a 27 de abril de 2020

Fotos: Movistar +, Atresmedia.

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